Descubrirse vulnerables y frágiles, curiosos y dulces. Una explosión. Y comprender que tal vez amar es otra cosa. Es sentirse ligeros y libres. Es saber que no pretendes apropiarte del corazón del otro, que no es tuyo, que no te toca por contrato. Debemos merecerlo cada día. Y se lo dices. Se lo dices a él. Y eres consciente de que hay respuestas que quizá deben cambiarse. Es preciso partir para volver a encontrar el camino. Porque cuando alguien a quien quieres se te va, intentas detenerlo con las manos, y esperas poder atrapar así también su corazón. Pero no es así. El corazón tiene piernas que no ves.
Me encanta tu blog, los textos son preciosos, si no te importa quizá te coja alguno jaja y la foto de la torre de parís ya directamente me enamoré.
ResponderEliminarPásate por mi blog y comenta y si te gusta pues mejor que mejor sígueme! jaja, te seguiré en plan impulso, vale la pena que la gente vea tu blog. Un beso enorme (L)
Muchísimas gracias! :D no, no me importa que cojas alguno (no todos jajaja)
EliminarTu blog me gusta muchísimo, lo conozco desde hace un tiempo, pero se me pasó darle a seguir.. lo siento jajaja lo veo bastante :)